El exfiscal general de Estados Unidos, William Barr, ya lo advirtió en su artículo de opinión en The Wall Street Journal: "El peligro que los cárteles representan para los Estados Unidos requiere que los enfrentemos principalmente como amenazas a la seguridad nacional, no como un asunto de aplicación de la ley. Estos grupos narcoterroristas se parecen más a ISIS que a la mafia estadounidense". Y 24 horas después, la realidad le dio la razón: cuatro estadounidenses eran secuestrados en México.
Las autoridades mexicanas no consideraron grave la desaparición. Según informó Telemundo, no comenzaron a investigar hasta que pasaron cuatro días. Ya era tarde. Horas después, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), confirmaba la triste noticia: dos de ellos (Shaeed Woodard y Zindel Brown) habían sido asesinados y los otros dos (Latavia 'Tay' McGee y Eric James Williams) eran llevados por las autoridades del país a la frontera en Texas en busca de asistencia médica.
Desde entonces, las novedades en el caso son continuas. Primero se procedía a la detención de un joven de 24 años, José Guadalupe N., como uno de los sospechosos del secuestro y el posterior asesinato de los dos jóvenes. Sin embargo, asegura Fox News, no podían asegurar que el arrestado perteneciese al Cartel del Golfo, el grupo al que se atribuye el rapto de los estadounidenses.
Ese mismo medio ampliaba la información sobre el motivo por el que los jóvenes viajaron a México: Latavia McGee (la única a la que no hirieron de gravedad durante el secuestro) quería realizarse una operación de abdominoplastia. La segunda a la que se sometía, según aseguraron sus familiares.
Novedades en la investigación: restricciones en los viajes a México
El otro superviviente, Eric James Williams, recibió tres disparos en la pierna, como informó su esposa a CNN. Ella pudo hablar con su marido mientras lo trasladaban a un hospital en Texas y relató a la cadena sus sentimientos al oír hablar a su esposo: "Me alegré de escuchar su voz".
Tanto él como Latavia McGee están ya en territorio americano, como aseguró el FBI mediante un comunicado en el que también afirmó que aún continúan investigando todos los hechos que rodearon al secuestro:
Esta sigue siendo una investigación criminal en curso ... Nuestro personal de Servicios a las Víctimas del FBI de múltiples oficinas de campo ha estado trabajando diligentemente para ayudar tanto a las víctimas como a sus familiares mientras se recuperan de este evento traumático. Estamos trabajando con DoS en la recuperación de las víctimas fallecidas a los Estados Unidos.
Y los Estados Unidos tomaron medidas al respecto. El Departamento de Estado reactivó la alerta y recomendó a los ciudadanos de la nación que evitasen viajar a México durante el Spring Break. Además, recordaron a los empleados del Gobierno lo siguiente:
No pueden viajar entre ciudades después del anochecer, no pueden parar taxis en la calle y deben evitar depender de vehículos enviados, incluidos servicios basados en aplicaciones como Uber y paradas de taxis reguladas. Los empleados del gobierno de los Estados Unidos deben evitar viajar solos, especialmente en áreas remotas. Los empleados del gobierno de los Estados Unidos no pueden conducir desde la frontera entre los Estados Unidos y México hacia o desde las partes interiores de México, excepto los viajes diurnos dentro de Baja California y entre Nogales y Hermosillo en la carretera federal mexicana 15D, y entre Nuevo Laredo y Monterrey en la carretera 85D.
Vuelve la polémica sobre la intervención de EEUU en México
La noticia del secuestro levantó la polémica. El senador Lindsey Graham aseguró que parte de la culpa de la situación se debía a que la Casa Blanca no había actuado antes: "Esta administración no ha hecho nada". Por ello, aseguró que, en este punto, tenía la intención de preparar una normativa para evitar que una situación como esta volviera a repetirse:
Voy a presentar una legislación (...) para convertir a ciertos cárteles mexicanos de la droga en organizaciones terroristas extranjeras bajo la ley estadounidense y preparar el escenario para usar la fuerza militar, si es necesario, para proteger a Estados Unidos de ser envenenado por cosas que salen de México.
Graham aprovechó su intervención en Fox News para enviar un mensaje claro a AMLO: "Le diría al Gobierno mexicano que si no limpia su propio patio, lo vamos a limpiar por ustedes".
El presidente de México contestó a las declaraciones de Graham. AMLO criticó la "manía" y "mala costumbre" de los Estados Unidos de "considerarse el gobierno del mundo" e intentar intervenir en asuntos que, según él, afectan internamente a otros gobiernos:
Pero todavía es peor que quieran utilizar la fuerza militar para intervenir en la vida pública de otro país. O sea, invadir a otro país con la excusa de que van sobre narcotraficantes terroristas. Desde luego, es pura propaganda. Sin embargo, hay que estar rechazando todas esas pretensiones de intervencionismo. México es un país independiente, soberano.
