Mayoritario rechazo al viraje socialista del Partido Demócrata

Candidatos demócratas al Senado como John Fetterman o Mandela Barnes adoptan unos discursos "demasiado extremistas" mal valorados entre los votantes.

Las previsiones más recientes apuntan a un empate entre el Partido Republicano y el Partido Demócrata en cuanto a número de senadores cara a las elecciones de noviembre. En total, son diez estados en los que se podría decantar la balanza hacia un lado o al otro y determinar quién gozará de la mayoría en el Senado.

La intención de voto del Partido Demócrata se está viendo mermada. Entre otros motivos, por la corriente socialista que crece en el partido a medida que se aproximan las midterm. Mandela Barnes o John Fetterman, aspirantes al Senado por Wisconsin y Pensilvania, respectivamente, son claros ejemplos de cómo la nueva generación del Partido Demócrata está virando hacia la extrema izquierda. En este caso, en estados clave para determinar la mayoría en la Cámara Alta.

"Demasiado extremistas"

En Wisconsin , el republicano Ron Johnson  aspira a mantener su puesto como senador frente a su rival político Mandela Barnes. El senador republicano aventaja hasta en cuatro puntos al candidato demócrata.

La percepción de Johnson por parte de los votantes es mucho más moderada que la de Mandela Barnes, a quien el 44% de los encuestados señala como "demasiado extremista" en sus opiniones. En la anterior encuesta esa cifra era de tres de cada diez votantes (30%), por lo que esta percepción de candidato extremista se ha disparado en 14 puntos porcentuales.

Por su parte, en Pensilvania, la distancia entre los candidatos al Senado John Fetterman y Mehmet Oz también se redujo en apenas dos meses. Las últimas encuestas vaticinan una ligera ventaja del aspirante demócrata, muy lejana a la que tenía en agosto.

La razón por la que la distancia entre ambos candidatos al Senado se reduce es la misma que en Wisconsin: el extremismo en sus discursos y acciones. La carrera de Fetterman como vicegobernador de Pensilvania se vio marcada por recomendar la liberación anticipada de numerosos presos condenados a cadena perpetua.

Alerta por la deriva socialista

Voces importantes dentro del Partido Demócrata como Bill Clinton advirtieron que el viraje hacia el socialismo por parte de candidatos o cargos demócratas perjudicaría al partido  cara a las elecciones de medio mandato de noviembre:

Quiero decir que perdimos las dos últimas semanas de las elecciones de 2020 con la desfinanciación de la policía y el socialismo, y eso fue culpa nuestra. No deberíamos dejar que eso ocurra.

Aparte de Barnes y Fetterman, otros políticos con gran popularidad entre el electorado demócrata como la congresista Alexandria Ocasio-Cortez o el senador Bernie Sanders hacen bandera de un discurso extremista y socialista.

Pese a que cada vez son más los representantes del Partido Demócrata que tornan a la extrema izquierda, solo el 36% de los estadounidenses ve como algo positivo el socialismo, incluyendo un 6% que es totalmente partidario de esta ideología.