La mayoría de los adultos se opone al llamado Drag Queen Story Hour (DSH). Según una encuesta de Rasmussen Reports, tres de cada cinco (60%) rechazan que se realicen estos eventos de travestismo en los colegios ante la presencia de los menores de edad. Solo el 29% considera estas actuaciones como "apropiadas".
Por otra parte, el 51% de los padres de alumnos menores de edad se opone firmemente a la celebración de estas actuaciones en las escuelas. Según esta encuesta, tanto los afines al Partido Republicano (83%) como al Partido Demócrata (53%) consideran las actuaciones del DSH como, al menos, algo inapropiadas para los menores. El 78% de los independientes también comparten esta misma opinión.
También existe un firme rechazo a la financiación federal del travestismo en los centros escolares. El 89% de los republicanos, el 56% de los demócratas y el 71% de los votantes independientes se oponen a otorgar fondos de los contribuyentes al DSH.
Drag Queen Story Hour define el término "drag" como "una forma artística de expresarte y mostrarle al mundo quién eres o quién quieres ser". Fue creado por la activista progresista Michelle Tea en 2015 para realizar actuaciones de travestismo para menores de edad como parte de la doctrina woke en las escuelas.
DSH cree que estos eventos son necesarios para "ayudar a los niños a desarrollar empatía, aprender sobre la diversidad y diferencia de género y aprovechar su propia creatividad" y afirma que "cree que las personas de todas las edades deben ser libres de expresarse como quieran, libres de las limitaciones de los roles de género prescritos".
