La retirada de Estados Unidos en 1.000 pequeños pasos

El buzón de voz encontrado en el ordenador de Hunter Biden muestra que el presidente ha acomodado la política a los intereses de su hijo.

El presidente Joe Biden ha estado mintiendo sobre su conocimiento y probablemente su participación en los negocios de su hijo desde al menos 2018.

Esa es la conclusión ineludible que se desprende de una breve grabación de un buzón de voz descubierta en el ordenador portátil que pertenecía a su hijo Hunter y de la que informaron recientemente The Daily Mail y The New York Post.

Negocios con China

Comienza de forma bastante inocente. "Hola colega, soy papá", comienza Joe Biden. "Son las 8:15 de la noche del miércoles. Si tienes la oportunidad, llámame. No es nada urgente. Sólo quería hablar contigo".

El mayor de los Biden pasa entonces a un tema concreto. Ese tema es la publicación de un artículo del New York Times en el que se detalla cómo, en 2014, "Ye Jianming cortejó a la familia Biden y se relacionó con antiguos funcionarios de seguridad de Estados Unidos." El artículo ofrece algunos detalles de los esfuerzos de Ye por atraer a Hunter Biden a negocios que le enriquecieran y le hicieran ganarse el favor de su padre, vicepresidente de Estados Unidos y recientemente designado "persona de contacto" de la administración del presidente Barack Obama en relación con China.

El mensaje de voz de Biden a Hunter continúa: "Creo que el artículo publicado en línea, que se publicará mañana en el Times, era bueno", dijo Biden. "Creo que está claro. Y de todos modos, si tienes la oportunidad, llámame, te quiero".

Joe Biden lo sabía

Por sí solo, esto no es determinante. Podría explicarse como la opinión de un político sobre una noticia que implica a su propio hijo en negocios con un inversor chino cuyas empresas comerciales entraron en mora. Pero colocado en el contexto adecuado, contra lo que ya se había informado en mi libro de 2018, Secret Empires, e informado anteriormente, muestra que Joe Biden en 2018 sabía mucho acerca de los negocios de su hijo, todos los cuales involucraron a las naciones extranjeras en las que el mayor de los Biden estaba sirviendo simultáneamente como la presencia diplomática más importante de Estados Unidos.

Además, concuerda con las palabras de un testigo presencial, concretamente el propio Hunter, que dijo al New Yorker en 2019 que habló de Burisma, el productor de gas natural ucraniano, con su padre ya en diciembre de 2015, mientras Hunter formaba parte del Consejo de Administración de Burisma, como informó USA Today en septiembre de 2019.

En la época de la conversación de 2015, Joe Biden se preparaba para un viaje a Ucrania y el enviado especial de la Administración Obama había planteado el tema al vicepresidente, según el artículo. Hunter Biden dijo al New Yorker que él y su padre hablaron sobre Burisma sólo una vez.

Salvad al candidato Biden

"Papá me dijo: 'Espero que sepas lo que estás haciendo'", declaró Hunter al New Yorker. "Y yo le contesté: 'Lo sé'", dijo Hunter. La campaña presidencial de su padre declinó hacer comentarios.

Joe Biden continuaría, como candidato y luego como presidente, negando, y luego dando marcha atrás, sobre si Joe tenía conocimiento de lo que su hijo estaba haciendo en el extranjero. Para aquellos que no se convencerían de lo que revelé en Secret Empires, publicado en abril de 2018 y que estuvo cinco semanas en la lista de bestsellers del New York Times -para aquellos que no se convencerían de las propias palabras de Hunter de que, de hecho, había discutido sus intereses comerciales en el extranjero con su padre-, ahora está la voz directa y grabada del propio Joe Biden, diciéndole a su hijo en 2018 que estaba "al tanto" de al menos uno de estos acuerdos.

Él negó todo esto, categóricamente, durante la campaña de 2020. Pero, como convino Gordon Chang en una reciente entrevista, ahí está.

Un pasado muy presente

Algunos pueden tener la tentación de atribuir esto a indiscreciones pasadas o incluso a la protección natural de un padre hacia su propio hijo. Pero nada de esto es realmente "pasado" y, dadas las investigaciones en curso sobre los negocios de Hunter, es difícil ver que le haya proporcionado mucha protección. Pero las mentiras sí protegieron la "viabilidad" de Joe Biden como candidato contra el presidente Donald Trump y desactivaron un asunto que llevó a la destitución de Trump por parte de la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, por sus esfuerzos para convencer al presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, de que investigara el asunto desde su propia perspectiva.

Pero el asunto sigue al rojo vivo porque todavía hay mucho en juego en las relaciones diplomáticas y comerciales entre Estados Unidos y China, que requieren que un presidente estadounidense priorice los intereses estadounidenses por encima de los de China... o de los suyos propios.

En una entrevista con Jason Chaffetz en el programa de Fox News Sunday Futures, describí la política de la Administración Biden hacia China como "un retroceso de 1.000 pequeños pasos".

  • Gracias a una interpretación del Departamento del Tesoro, los estadounidenses pueden seguir poseyendo acciones de empresas que fueron incluidas en una lista negra por la administración Trump debido a sus vínculos directos con el ejército chino.
  • Gracias a la Administración Biden, la Iniciativa China del Departamento de Justicia para reprimir los intentos de China de adquirir o robar tecnología estadounidense ha sido interrumpida.
  • Gracias al entusiasmo de la Administración Biden por la energía verde, se eliminaron los aranceles sobre los paneles solares fabricados por países asiáticos que ensamblan o reempaquetan paneles solares fabricados en China.
  • La Administración Biden también ha señalado su intención de eliminar o levantar otros aranceles impuestos por la Administración Trump a los productos chinos. También se ha mostrado más amable con empresas chinas como Huawei y ByteDance (propietaria de TikTok) en las últimas semanas.

Y todo esto se ha hecho con cero concesiones por parte del Gobierno chino en cualquiera de las cuestiones diplomáticas, militares, estratégicas, sanitarias o comerciales pendientes que tanto preocupan a la mayoría de los estadounidenses.

Esta historia es impactante, amenaza la seguridad nacional y debería dominar la atención de los principales periódicos y cadenas de noticias por sus condenables implicaciones. Dado que la familia Biden ha estado tan profundamente involucrada y ha negado con tanta vehemencia su participación en los negocios chinos, la siguiente pregunta es tan ineludible como la primera: ¿influye el flujo de dinero a la familia Biden desde China en la política exterior de Estados Unidos?

Basándose en una montaña de pruebas documentales rematadas con un breve e íntimo mensaje de voz, la respuesta parece más clara que nunca.