Casi tres meses después de que la reina Isabel II falleciese en Balmoral, los duques de Sussex estrenan el primer tráiler del documental de Netflix, Harry y Meghan. El avance, de algo más de un minuto, comienza con una pregunta dirigida a Harry: "¿Por qué quieres realizar este documental?" seguido de varias instantáneas en blanco y negro de la pareja durante algunos de los momentos de su vida en común. "Nadie ve lo que pasa a puerta cerrada", asegura el hijo de Carlos III.
El teaser del documental, que según aseguraron fuentes de la industria al Daily Mail podría ver la luz en tan solo una semana (el 8 de diciembre), continúa con imágenes de la duquesa disgustada. Le siguen instantáneas de su vida mientras formaba parte de la familia británica donde también se pueden apreciar fotografías de Kate Middleton y del príncipe Guillermo así como imágenes de cientos de paparazis pendientes de cada uno de sus movimientos.
Estas imágenes ejemplifican lo que Harry declara después, la razón por la que decidió abandonar sus obligaciones en la familia real británica: "Debía hacer todo lo posible para proteger a mi familia" seguida de otra ráfaga de imágenes que muestran distintos momentos de la monarquía británica.
El tráiler finaliza con la exactriz estadounidense Meghan Markle mostrando la intención que tiene la pareja al realizar este producto audiovisual con la siguiente pregunta: "Cuando hay tanto en juego, ¿no tiene más sentido oír de nosotros nuestra propia historia?"
Sinopsis
El documental, por el que el matrimonio cobró 88 millones de libras (108 millones de dólares), está producido por Netflix. La plataforma en streaming ya abrió una página web para Harry y Meghan donde define este producto como una "serie documental sin precedentes y en profundidad" de seis episodios donde los duques de Sussex "comparten el otro lado de su historia de amor de alto perfil".
Para ello, asegura la cadena, el documental "explora los días clandestinos de su noviazgo temprano y los desafíos que los llevaron a sentirse obligados a alejarse de sus roles a tiempo completo" en la monarquía británica otorgando de esta forma, una "mirada nunca antes vista a una de las parejas más discutidas de la historia".
