Más de 1.790 agentes han muerto en acto de servicio en los últimos cinco años
Desde el año del fallecimiento de George Floyd se registraron más de 500 "muertes criminales" de oficiales, según datos del Memorial Nacional a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Además, la Orden Fraternal Nacional de Policía denuncia un aumento "inaceptable" en las emboscadas contra policías.

Oficiales caídos en 2025
Veterano de la armada, con 30 años de servicio policial a sus espaldas, el teniente Mark Meadows (60) fue arrollado cuando, a la mañana, frente a la iglesia Highlands, colocaba conos en una intersección en Irondale, Alabama. Transportado de urgencia al Centro Médico Grandview, fue declarado muerto poco después. Lo sobrevivieron su madre, su esposa, tres hijos y una nieta.
La muerte del "guerrero discreto" Meadows, como lo recuerdan sus seres queridos, el pasado 6 de enero encendió el lúgubre contador de uniformados muertos en servicio en 2025. Desde entonces, se le sumaron otros 14 nombres:
- Timothy Corlew, ayudante del Sheriff, 8 de enero, accidente de moto; Jesus Vargas, ayudante del Sheriff, 15 de enero, disparos; Mark Butler, sargento, 15 de enero, agresión con vehículo; David Christopher Maland, agente de la Patrulla Fronteriza, 20 de enero, disparos; Baldino Morales-Sánchez, oficial, 25 de enero, accidente de moto.
- El mes siguiente: Jason Roscow, oficial, 4 de febrero, disparos; Jeremy R. Labonte, oficial, 7 de febrero, disparos; Kyle McAcy, policía, 17 de febrero, atropellado por un vehículo; Andrew William Duarte, patrullero, 22 de febrero, disparos; Cameron Robert Girvin, agente de policía, 22 de febrero, disparos; Christopher M. L. Reese, agente de policía, 22 de febrero, disparos; Martin Shields, Jr., sargento adjunto, 23 de febrero, disparos.
- Ya en marzo: Felicia Dee Reilly, agente de policía, 1 de marzo, Asalto, Joseph Azcona, detective, 7 de marzo, disparos.
Todas aquellas muertes azules recogidas por el Memorial Nacional a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (ODMP, por sus siglas en inglés) se añaden, además, a las 1.780 registradas por la ONG en los últimos cinco años. Y a otras 903 en los últimos diez, sumando en total 2.698 oficiales muertos en una década.
Un promedio anual de 300 agentes caídos en servicio desde el año de la muerte de George Floyd, que desató un debate nacional sobre la Policía. Quienes señalan con preocupación aquella cifra apuntan a movimientos derivados de aquel episodio como defund the police ("desfinancien la Policía") por desprestigiar a los agentes y promover una quita de recursos que pone en riesgo su vida.
Los datos del ODMP analizados por VOZ revelan que, aunque el número de agentes fallecidos en funciones ha caído desde 2020, tras un aumento inicial en 2021, la proporción de muertes violentas ha aumentado. Disparos, asaltos en la patrulla, atropellos, apuñalamientos e incluso ahogamientos, todos figuran en el registro.
Así, si en 2020 y 2021 el porcentaje de muertes criminales rondaban el 20%, en 2022 escalaron al 56%. En 2023 volvieron a subir hasta el 66% y en 2024 bajaron, levemente, al 63%.
Los reportes de ataques a policías de la Orden Fraternal Nacional de Policía (FOP) ayudan a completar aquel cuadro: contabilizaron 9 "emboscadas" contra agentes del orden desde inicios del año hasta fines de febrero.
En 2024, la FOP registró 61 emboscadas. En 56% de ellas, los oficiales no se encontraban participando de una operación. "Las emboscadas contra policías han ido en aumento", denunciaron en una publicación a inicios de mes: "Esto es inaceptable: nuestros agentes merecen algo mejor".
"Este tipo de ataques se llevan a cabo con un elemento de sorpresa y pretenden privar a los agentes de su capacidad para defenderse del ataque", explicaron desde el sindicato policial. "Los atentados premeditados contribuyen a una preocupante insensibilización ante actos malvados que antaño se consideraban en gran medida tabú, salvo para los individuos más depravados".
Asimismo, el FOP señala que el números de tiroteos y oficiales fallecidos en tiroteos han fluctuado en la última década alrededor de los 350 tiroteos y los 50 policías muertos por heridas de bala al año. De acuerdo con el gremio, el 2023 fue el año con más tiroteos (378), mientras que el 2021 fue el que se apuntó más muertos (64).
Una década negra
En un informe especial del 2023, el FBI señaló que más oficiales habían sido asesinados entre 2021 y 2023 que en cualquier otro período consecutivo de tres años en más de 20 años.
Sobre los ataques, con resultado mortal o no, asegura que en la última década "la tasa de agresiones contra agentes de las fuerzas del orden ha ido en aumento desde 2021, con el uso de armas de fuego en más de 300 incidentes de agresión contra agentes cada año desde 2020".
Disgregando aquellos datos, que coinciden parcialmente con los del ODMP, la agencia explica que los oficiales caídos entre 2014 y 2023 tenían un promedio de 12 años de servicio. La franja horaria entre las 6:01 pm y las 12:00 am fue la más mortífera. Mientras que los espacios públicos fueron la peor ubicación, seguidos de lugares residenciales, comerciales y gubernamentales.