Trump es mejor para los hispanos, mientras que Harris causaría graves perjuicios
Las políticas del expresidente generaron billones de dólares, y las empresas de propiedad hispana fueron la categoría de pequeñas empresas de más rápido crecimiento en los Estados Unidos.
Nací en una familia de trabajadores agrícolas inmigrantes. Mi padre no tenía nada más que el sueño de que sus hijos prosperaran cuando vino a los Estados Unidos, y a mí me enseñaron desde muy joven a darlo todo por una vida mejor. También he aprendido a apreciar las oportunidades que ofrece este hermoso país, y creo en los Estados Unidos.
Mi familia recogía fresas en los campos de California y, con determinación y trabajo duro, construimos un negocio agrícola exitoso. El recorrido desde trabajador agrícola a empresario, y luego hasta el alto cargo de Vicegobernador de California me ha enseñado que el sueño americano se basa fundamentalmente en las oportunidades económicas.
Al igual que millones de hispanos, mi propia familia vino a esta nación en busca de la oportunidad de construir un futuro mejor. Un futuro que se ha vuelto cada vez más inalcanzable debido a los precios récord y los salarios reales más bajos en el Gobierno de Harris y Biden. Por esta razón, los insto a votar por Donald Trump para presidente de los Estados Unidos. Las políticas de Trump dieron a todos los estadounidenses, incluyendo a nuestras comunidades hispanas, un camino claro hacia las oportunidades económicas. En su administración, se crearon nuevas oportunidades para la comunidad hispana, y su compromiso de restaurar esa prosperidad económica brindará esperanza a millones de personas que luchan por salir adelante.
Las historias de muchos hispanos en este país están entrelazadas con la mía. Mi padre era un hombre joven cuando dejó México para cultivar los campos de Estados Unidos y alimentar a su familia. Me enseñó que, con una fuerte ética de trabajo, era posible alcanzar el Sueño Americano. Y tenía razón. Mi familia comenzó un negocio agrícola desde los campos y puso comida en las mesas de todos los Estados Unidos.
Aplicando esas lecciones de trabajo duro y servicio en la vida pública, acabé convirtiéndome en Alcalde de Santa María, luego en senador estatal y, finalmente, llegué a ser el 48º vicegobernador de California.
A lo largo de mi carrera, he luchado por las comunidades hispanas y he trabajado para promover políticas que generen empleos para todos. Por eso estoy compartiendo esto hoy. Veo una opción, creo que está claro que como resultado de las próximas elecciones presidenciales, Donald Trump permitirá que los hispanos prosperen y recuperen oportunidades económicas.
Con el presidente Trump, los hispanos tuvieron una prosperidad económica sin precedentes. Su liderazgo trajo consigo la tasa de desempleo hispano más baja en la historia de Estados Unidos, alcanzando un récord de 3,9%. Sus políticas de reducción de impuestos y eliminación de regulaciones para las pequeñas empresas significaron más ingresos para los nacientes negocios hispanos, y les permitieron reinvertir en sus comunidades.
Con su logro económico emblemático, la Ley de Reducción de Impuestos y Empleos, Trump desmontó barreras económicas al reducir los impuestos a las pequeñas empresas, lo que creó un entorno generador de empleo en la comunidad hispana. Las políticas del presidente Trump generaron billones de dólares, y las empresas de propiedad hispana fueron la categoría de pequeñas empresas de más rápido crecimiento en los Estados Unidos. El éxito de estas empresas fortaleció la economía y llevó a nuestras comunidades a nuevas alturas.
No solo se redujeron los impuestos y se crearon empleos, sino que el crecimiento salarial de los hispanos también aumentó enormemente. El ingreso familiar promedio de los hispanos aumentó más del 7%, lo que permitió a las familias hispanas comprar casas e invertir en el futuro de sus hijos. Estos son los resultados tangibles que vimos en la comunidad hispana y que fueron un producto directo de las políticas económicas del presidente Trump que impulsaron a las pequeñas empresas.
En contraste, bajo la administración de Kamala Harris y Joe Biden, el costo de vida se ha disparado. La inflación ha alcanzado sus niveles más altos en décadas, lo que ha hecho subir el precio de todo, desde los alimentos hasta la gasolina. Las familias hispanas, muchas de las cuales ya luchan por llegar a fin de mes, se han visto desproporcionadamente afectadas por este aumento de los precios.
¿Qué tan bueno puede ser un empleo, si el cheque de pago que recibimos no estira tanto como solía hacerlo?
Las políticas energéticas de Harris-Biden han empeorado mucho las dificultades económicas de los hispanos. Bajo su mandato, han aumentado los costos de la gasolina mediante restricciones a la producción energética nacional y la promoción de programas de energía verde cuya eficacia no ha sido comprobada. Estas medidas han sido desastrosas para los trabajadores hispanos que dependen de combustible a precios razonables para desplazarse al trabajo.
Una presidencia de Kamala Harris llevaría las políticas económicas aún más a la izquierda que esta administración actual. Durante su desempeño en el Senado de los Estados Unidos, Harris respaldó políticas como el Nuevo Pacto Verde, que establece como objetivo la eliminación de todos los combustibles fósiles y eliminaría efectivamente millones de puestos de trabajo. Esto sería desastroso para la población hispana, ya que millones de personas que actualmente trabajan en los sectores de la energía y la agricultura verían aniquilados sus medios de vida. Las políticas que colocan a los estadounidenses trabajadores por debajo de una ideología poco práctica no son algo que podamos permitirnos.
Como ejemplo, consideremos que, mientras escribo esto, el precio promedio de la gasolina es de $3,21 dólares por galón, más de un dólar por galón por encima de lo que estaba el día en que ella asumió la vicepresidencia. De hecho, la gasolina ha estado a más de $3 dólares por galón a lo largo de más de 1,200 días seguidos y no hay razón para creer que una presidencia de Harris revertiría nada de esto, por el contrario, ciertamente empeoraría.
Una presidencia de Harris traería consigo impuestos más altos – casi $36,000 dólares en nuevos impuestos para la familia promedio – y más regulaciones para las pequeñas empresas hispanas que apenas pueden sobrevivir. Su liderazgo provocaría pérdidas masivas de empleos y acabaría con las cuentas de ahorros. Por eso, es esencial mantenerla lo más lejos posible de la Oficina Oval y así generar prosperidad económica en este país.
Como hijo de trabajadores agrícolas inmigrantes entiendo qué es lo que se necesita para alcanzar el Sueño Americano. El Presidente Trump tiene claro lo que hace falta para que la población hispana alcance la prosperidad económica, por lo que creo que es el mejor candidato para nuestras comunidades en esta contienda. Su liderazgo demostrado dio a los hispanos logros económicos récord, que se han visto obstaculizados bajo esta administración y se destruirían bajo un mandato de la presidenta Harris. Votemos por Donald Trump este noviembre para que Estados Unidos vuelva a encarrilarse.
Abel O. Maldonado, Jr. se desempeñó como vicegobernador de California en 2010 y 2011.