El número de embarazadas que murieron se disparó durante la pandemia del coronavirus. Según un informe del Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias, 1.205 mujeres en estado de gestación perdieron la vida en 2021, lo que representa un aumento de alrededor de un 30% respecto a 2020 (861 muertes) y de un 37% respecto a 2019 (754).
Además, la tasa de mortalidad materna -número de embarazadas muertas por cada 100.000 recién nacidos- también se incrementó considerablemente durante la pandemia. En 2021, la tasa de mortalidad materna fue de un 32,9%, mientras que en 2020 fue de un 23,8% y en 2019 un 20,1%.
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La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la mortalidad materna como "la muerte de una mujer durante el embarazo o dentro de los 42 días siguientes a la terminación del embarazo, independientemente de la duración y el lugar del embarazo, por cualquier causa relacionada con el embarazo o agravada por este o su tratamiento, pero no por causas accidentales o incidentales"-
Las mujeres hispanas padecen un incremento de un 10% de 2020 a 2021
El ratio de mortalidad materna entre mujeres hispanas se incrementó en algo más de un 30% durante la pandemia según el informe. En 2021, la tasa fue de un 28%, por un 18,2% en 2020. En 2019, el registro fue de un 12,6%.
Por otro lado, la tasa de mortalidad materna en la comunidad blanca no hispana fue de un 26,6% en 2021, sufriendo un aumento de un 7,5% respecto a 2020. Las mujeres negras no hispanas tuvieron el incremento más alarmante, pasando de un 55,3% en 2020 a un 69,9% en 2021.
