El ejército derribó un nuevo objeto no identificado sobre el Lago Hurón, en la frontera con Canadá

Volaba a unos 65.000 pies de altura y una vez más fueron los aviones de combate los que lo derribaron.

El ejército estadounidense derribó un objeto volador mientras estaba sobre el lago Huron en Michigan, convirtiéndose en el cuarto artefacto no identificado que ha estado sobrevolando el territorio estadounidense desde el 4 de febrero y el tercero en tres días.

El representante republicano de Michigan Jack Bergman contó que los pilotos de combate fueron los encargados una vez más de dar de baja a otro objeto que sobrevolaba Estados Unidos. En este caso, el artefacto era de forma octogonal.

“He estado en contacto con el Departamento de Defensa en relación con las operaciones llevadas a cabo hoy [este domingo] en la región de los Grandes Lagos. El ejército estadounidense ha desmantelado otro ‘objeto’ sobre el lago Hurón. Aprecio la acción decisiva de nuestros pilotos de caza. El pueblo estadounidense merece muchas más respuestas de las que tenemos”, expresó Bergman a través de Twitter.

De acuerdo al legislador el objeto estaba a unos 65.000 pies (20.000 metros) de altura. Las autoridades tanto de Estados Unidos como de Canadá tomaron la decisión de restringir el espacio aéreo cercano a la zona, para que los aviones de combate pudiesen interceptarlo e intentar de identificarlo.

Aun no se ha logrado determinar si China es el responsable de los objetos voladores que se han derribado recientemente, pero un portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, le dijo recientemente a la cadena británica BBC, que el globo chino que fue derribado el 4 de febrero era mucho más grande que los que se han detectado más adelante.

“Estos objetos no se parecen ni cercanamente, eran mucho más pequeños que el globo detectado [el 4 de febrero], y definitivamente no definiremos su carácter hasta que recuperemos sus restos”, dijo.

De acuerdo a algunos medios estadounidenses, la razón de que se estén encontrando más objetos voladores sobre terreno estadounidense, es que los radares norteamericanos fueron reajustados desde que se localizó el globo chino espía.