El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó este lunes de que desplegará coches totalmente eléctricos para sus operaciones. El DHS detalló que son la primera agencia federal en debutar con un vehículo eléctrico para uso policial, y tienen planes de utilizar una variedad de esos automóviles en todo el país.
"El Ford Mustang Mach-E es el primero de una variedad de vehículos eléctricos que el DHS planea desplegar en sus variadas misiones de aplicación de la ley en toda la patria", se lee en el comunicado. El Departamento de Seguridad Nacional aseguró que los coches eléctricos tienen el potencial de mejorar significativamente la eficiencia de la flota federal y reducir los costos de operación y mantenimiento de los vehículos, Con estas medidas el departamento detalló que logrará “reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Sin embargo, muchos se cuestionan si es el momento de de realizar un cambio tan radical en la flota de los vehículos destinados a la seguridad. Sin ir más lejos el anuncio del DHS se produce en medio de uno de los puntos más álgidos de la crisis migratoria que sacude a la frontera sur del país, en la que más de 2,5 millones de ilegales han sido detenidos en lo que va de año fiscal.
Con unos contrabandistas y traficantes que cada vez cuentan con más medios, se pone en duda la eficacia del vehículo eléctrico en puntos como la frontera con México, debido a la todavía insuficiente fiabilidad de este tipo de automóviles.
Los americanos no se fían de los coches eléctricos: sólo un 28% los considera útiles
La mayoría de los estadounidenses considera que no son prácticos los coches eléctricos. Tan solo el 28% de la población cree en la utilidad de este tipo de vehículos, porcentaje que además va decreciendo con el paso del tiempo.
Una encuesta realizada por Rasmussen Reports muestra que el 54% de los adultos rechaza los coches eléctricos, mientras que el 18% está inseguro de su funcionalidad. Respecto a la anterior encuesta del pasado marzo, se registró un incremento de la desconfianza hacia estos vehículos. En aquel entonces los que los consideraban poco útiles eran el 52% de los encuestados.
Por otra parte la Administración de Biden está gastando miles de millones en promover los coches eléctricos para cumplir con su objetivo de que la mitad de los vehículos que se vendan en 2030 sean eléctricos, así como en acoplar enchufes a los surtidores de las gasolineras.
El Partido Republicano se opone a estas políticas porque considera que perjudican a los trabajadores y los fabricantes norteamericanos y benefician a China. Los republicanos ponen como ejemplo lo que sucede con Ford Motor Company, que va a adquirir baterías eléctricas a empresas chinas como CATL y eliminará hasta 8.000 puestos de trabajo.
