EEUU va mal: la economía, la delincuencia y Biden, los principales culpables

La inmigración, la división política y los problemas sociales aparecen también como causas de esta percepción, mientras que un número significativo se muestra satisfecho con su propia vida.

Una amplia mayoría de los estadounidenses no está satisfecha con la marcha del país.  Las principales razones son la situación económica, la delincuencia y el actual presidente, Joe Biden. Además, el aumento de la delincuencia, la división partidista, la inmigración, los problemas sociales también contribuyen al pesimismo nacional. En contraste, un número significativo de ciudadanos se declaró satisfecho con su propia vida.

El 69% cree que EEUU va "bastante o muy mal"

Así lo indica una encuesta de la CNN, publicada el sábado, según la cual el 69% de los encuestados consideran que las cosas en el país marchan "bastante o muy mal". Las preocupantes previsiones económicas son una de las principales razones que explican estas cifras. Tampoco ayudan las noticias sobre despidos  de miles de personas desde las grandes empresas y la incertidumbre sobre la verdadera situación del sistema financiero. Entre las razones más repetidas entre quienes aseguran que las cosas van mal se encuentran la inflación y el coste de la vida. Además, existe una diferencia importante en la percepción de la situación dependiendo del partido al que se vote. Así, mientras que el 58% de los simpatizantes republicanos ve como la marcha económica una causa para su descontento, el número se reduce al 42% entre los demócratas.

El 16% señala a la delincuencia y a la violencia armada

En segundo lugar aparece la delincuencia. Hasta un 16% de los estadounidenses declaró que la principal causa de la mala situación nacional es la delincuencia o la violencia armada. No obstante, dentro de esta cifra se encuentran diferentes modalidades, principalmente agrupadas el temor a revueltas violentas, la anarquía o los últimos tiroteos en escuelas. Un número menor apunta al tráfico de drogas, la policía, el sistema penal y los sin techo.

Biden, responsable para el 11%

El podio lo cierra la confianza de los encuestados en el actual inquilino de la Casa Blanca, a quien el 11% señalaba directamente como responsable de la mala marcha del país, una cifra que crece al 17% si sólo se preguntaba a votantes conservadores.  La popularidad de Biden vuelve a rozar sus mínimos, según diferentes sondeos. El último muestreo de CNN, que data de marzo, muestra que el índice de aprobación sobre la labor de Biden como presidente era del 42%. No obstante, otras encuestas más recientes indican que cada vez menos personas consideran que el mandatario está cumpliendo al frente del país. Por ejemplo, en la última encuesta publicada hasta el momento, de Gallup, sólo el 37% aprueba su gestión, su mínimo durante la legislatura para este encuestador.

La inmigración, principal preocupación para el 10%

El siguiente punto de descontento es la inmigración. Un 10% de los participantes que considera que las cosas van mal apuntó a este asunto y a la situación de la frontera como a la causa más destacada. Entre quienes apuntaron mayoritariamente a este punto se encuentran votantes republicanos (17%), mayores de 45 años (15%) y estadounidenses blancos (12%).

División bipartidista

La tensión entre los principales partidos es otra causa de preocupación para los encuestados. Este creciente alejamiento entre ambas formaciones se nota también entre sus seguidores. Según la encuesta, el 91% de los seguidores republicanos consideraban que el país va mal, frente al 48% de los demócratas. El 7% de quienes ven con pesimismo la situación nacional señala como causante las divisiones políticas o sociales del país. Los votantes demócratas (13%) y las personas con estudios universitarios (12%) son los que señalan este punto como la principal causa de su desánimo.

La mayoría, satisfecha con su propia vida

Como contraposición, la mayoría de los estadounidenses se consideran relativamente satisfechos con el curso de sus propias vidas. De hecho, el 8% de quienes consideran que EEUU va bien lo hacen desde la perspectiva de sus propias vivencias personales.