Continúan las investigaciones sobre las causas del colapso aéreo

La FAA y el DOT no encontraron evidencias de un posible ciberataque, pero aún no lo descartan.

La Administración Federal de la Aviación (FAA) y el Departamento de Transportes continúan investigando las causas del fallo informático que provocó la cancelación de más de 1.300 vuelos y el retraso de más de 10.600 el pasado miércoles en EE.UU. Tanto la portavoz de la casa Blanca, Karine Jean-Pierre como el secretario de Transportes, Pete Buttigieg, y la misma FAA señalaron que, por el momento, "no hay evidencias de un ciberataque" como origen de los problemas, aunque reconocieron que "aún no estamos preparados para descartarlo".

Buttigieg subió un vídeo a las redes sociales durante la tarde en el que analizaba lo vivido en los aeropuertos del país durante la jornada. Según anunció la FAA a primeras horas del miércoles, un fallo en el Sistema de Notificaciones de Misiones Aéreas (NOTAM), llevó al organismo a detener el tráfico aéreo de todo el país al no poder garantizar la seguridad de los vuelos. Una decisión que, según el secretario de Transporte justificó por el compromiso de la Administración Biden con la seguridad de los ciudadanos. Como resultado, según los datos de flight aware, 10.632 aviones sufrieron retrasos, mientras que 1.353 vuelos fueron cancelados.

"Errar por el lado de la seguridad"

"La seguridad es siempre nuestra primera prioridad, y garantizar la seguridad de los vuelos fue el motivo de la parada en tierra de esta mañana mientras se restablecían y comprobaban los sistemas afectados", explicó Buttigieg en la publicación. Algo en lo que abundaba en el videocomunicado, en el que subraya que "siempre vamos a errar por el lado de la seguridad".

"Dicho esto, también tenemos que asegurarnos de que entendemos todo lo que hay que entender sobre esta situación para que podamos asegurarnos de que una interrupción como esta no vuelva a ocurrir", añadió, escribiendo en el tuit que la FAA sigue "evaluando las causas de la interrupción".

Biden ordenó una investigación exhaustiva

Horas antes, Jean-Pierre indicó en una rueda de prensa que el presidente Biden había sido informado de lo ocurrido. Según la portavoz de la Casa Blanca, a pesar de que "por el momento no hay pruebas de que se trate de un ciberataque, el Presidente ha ordenado al Departamento de Transporte que investigue a fondo las causas". Además, remitía a las actualizaciones periódicas que la FAA iría ofreciendo a lo largo del día para más información.

¿Ciberataque o archivo dañado?

Precisamente en las últimas actualizaciones ofrecidas por el organismo, la FAA apuntaba a "un archivo de base de datos dañado" como origen del problema, e insistía en que seguían sin encontrar rastro de un posible ciberataque.