Bill Clinton alertó al Partido Demócrata de los peligros de acercarse al socialismo. Después de que políticos como Bernie Sanders o Alexandria Ocasio-Cortez alcanzasen popularidad dentro del movimiento demócrata tratando de establecer el dogma socialista y políticas más cercanas a la extrema izquierda; el expresidente Clinton trata de parar esta corriente para que no dañe al Partido Demócrata cara a las elecciones de medio mandato de noviembre.
Durante una conferencia en la Universidad de Georgetown, el expresidente advirtió al Partido Demócrata que tanto el socialismo como la desfinanciación de la policía pueden perjudicarles en el apoyo y los resultados que obtengan en las midterm:
Quiero decir que perdimos las dos últimas semanas de las elecciones de 2020 con la desfinanciación de la policía y el socialismo, y eso fue culpa nuestra. No deberíamos dejar que eso ocurra.
Cae la valoración positiva del socialismo
Cada vez que se pregunta por la opinión del socialismo, la perspectiva positiva acerca de esta doctrina cae. Según la última encuesta realizada por Pew Research Center, tan solo el 36% de los ciudadanos lo ve como algo positivo, incluyendo un 6% que lo ve como muy favorable. En cambio, en 2019 el 42% aprobaba el socialismo, es decir, un descenso de seis puntos porcentuales.
Según la encuesta de Pew Research Center, el prototipo demográfico de persona que ve positivo el socialismo es una mujer negra, de entre 18 y 29 años, con título de posgrado y bajos ingresos.
Son muchos más los demócratas que los republicanos quienes creen que el socialismo es efectivo, pese a que también desciende este baremo respecto al registro de 2019. Tres años atrás, el 65% de los afines al Partido Demócrata lo apoyaba y, ahora, desciende en ocho puntos y recibe el respaldo del 57%.
Por su parte, casi la totalidad de los republicanos desaprueba el socialismo. Tan solo el 14% afín al GOP encuentra positiva la tendencia socialista.
La popularidad del socialismo decrece pese a que, según la encuesta, numerosos estadounidenses siguen pensando que es la corriente política que tiene más posibilidades de satisfacer las necesidades básicas. Eso sí, esta percepción dista mucho según a qué partido apoya cada persona: el 56% de los demócratas lo corrobora frente al 19% republicano.
Por el contrario, el 62% de los republicanos piensa que el socialismo restringe las libertades individuales frente al 19% de los afines al Partido Demócrata.
La mayoría sigue respaldando el capitalismo
No solo cae la visión positiva del socialismo, también del capitalismo. Estados Unidos, ejemplo del sistema capitalista, continúa sumando ciudadanos que sin embargo abandonan la percepción favorable del mismo.
El arquetipo de capitalista norteamericano, según la encuesta de Pew Research Center, es un hombre blanco, mayor de 65 años con títulos superiores y altos ingresos.
Pese a que sufre un ligero descenso de ocho puntos respecto al registro de 2019, sigue habiendo una mayoría absoluta que apoya el capitalismo. El 57% ve muy o algo positivo la corriente capitalista. Además, el 36% piensa que asegura la igualdad de oportunidades a todo el mundo (por el 23% de apoyo que recibe el socialismo).
El capitalismo sufre un ligero descenso de la valoración positiva por parte de los vinculados al Partido Republicano: del 78% que lo respaldaba en 2019 pasa al 74%. En cambio, son los demócratas los más críticos con el capitalismo: si tres años atrás el 55% veía al capitalismo como el mejor sistema, ahora lo hace tan solo el 46%.
