Arkansas prohíbe a las personas trans usar baños que no correspondan a su género biológico

El Senado estatal sacó adelante un proyecto de ley por el que cualquier persona que lo incumpla podría ser acusada de un delito menor.

Arkansas aprobó este martes un proyecto de ley que prohíbe a las personas transgénero usar baños que no se correspondan a su género biológico. El Senado estatal, de mayoría republicana, sacó adelante esta norma por la que cualquier persona que la incumpla incurrirá en un delito menor. Tras pasar por el Senado, la norma deberá pasar por la Cámara de Representantes estatal.

El proyecto de ley SB270 se aprobó en una votación de 19-7 y permitirá que alguien sea acusado de un delito menor de indecencia sexual con un niño si uso un baño público o vestuario del sexo opuesto cuando un menor está presente. Además, la ley asegura que los vestuarios públicos se definen también como baños, casilleros o duchas, por lo que entrarían dentro de los espacios restringidos a las personas trans. No sucede lo mismo con los vestidores designados en una tienda donde se vende ropa que quedaron excluidos de la ley.

Los críticos aseguran que es la ley más estricta del país

Un hecho que la directora legislativa estatal y asesora principal de la Campaña de Derechos Humanos, Cathryn Oakley, aseguró viola los derechos de las personas trans: "Esto es un ataque a la existencia continua en público de personas transgénero, y la criminalización de ser transgénero en público".

El principal patrocinador del proyecto de ley, el senador republicano John Payton, aseguró que la medida está elaborada con la dosis de dureza correcta. Según aseguró, sólo sea aplicará cuando hubiese menores presentes y, además, reconoció que sería difícil detener a alguien por violar la restricción: "Simplemente no veo esto como el proyecto de ley que impide que la gente vaya al baño equivocado. Esperemos que solo lo limite a cuando los niños están presentes".

Además, el proyecto de ley de Arkansas permite excepciones a la legislación. Así, los padres o cuidadores con un niño del sexo opuesto podrán entrar en baños que no corresponden a su sexo biológico. Lo mismo sucede en el caso del personal de servicios de limpieza de una habitación, en la asistencia médica o en el caso de que un policía deba entrar para escoltar a una persona detenida.