Alex Murdaugh, sentenciado a cadena perpetua por el asesinato de su mujer y su hijo

El exabogado no tendrá posibilidad de libertad condicional, según la condena dictada por el juez Clifton Newman.

Alex Murdaugh fue condenado a cadena perpetua por el asesinato de su mujer y su hijo. El juez Clifton Newman dictaminó la sentencia, sin posibilidad de libertad condicional, ante el Tribunal de Circuito de Carolina del Sur, en Walterboro: "Le sentencio a que pase el resto de su vida natural en prisión por asesinar a su esposa, Margaret, y a su hijo, Paul. Probablemente usted los amaba demasiado. Le sentencio para el resto de su vida a prisión".

Además, el juez Clifton Newman aseguró a Alex Murdaugh que estaba seguro de que el crimen le perseguiría durante el resto de su vida: "Estoy seguro de que verá a Paul y a Maggie por la noche cuando intente dormirse. Seguro que vienen a visitarle. Estoy seguro". A lo que el acusado contestó: "Cada día y cada noche".

Alex Murdaugh defiende en todo momento su inocencia

El jurado decidió en apenas tres horas la culpabilidad de Alex Murdaugh por el asesinato de su mujer y su hijo tras un juicio de seis semanas. Los cuerpos de la esposa del prestigioso exabogado, Margaret, y su hijo de 22 años, Paul, aparecieron sin vida en junio de 2021 cerca de su propiedad familiar. Las autoridades determinaron que tanto Margaret como Paul fueron alcanzados por varios disparos.

Murdaugh, de 54 años, negó rotundamente su culpabilidad. Incluso momentos antes de conocer su sentencia. En ese momento, el exabogado habló ante la corte del condado de Colleton y aseguró, nuevamente, que no era responsable de asesinar a su esposa e hijo: "Soy inocente. Nunca lastimaría a mi esposa, Maggie. Y nunca lastimaría a mi hijo Paul".

Sin embargo, a pesar de no haber evidencias directas del crimen, las decenas de testigos que declararon durante el juicio sirvieron para determinar la culpabilidad de Murdaugh. La Fiscalía definió el crimen como un intento del exletrado por ganar simpatía y desviar la mirada pública de sus presuntos delitos financieros. Un juicio al que deberá enfrentarse más adelante.