La Administración Biden se encamina a la prohibición del automóvil de gasolina

Los secretarios de Transporte y Energía defienden las medidas radicales de California pese a los datos que ponen en entredicho las ventajas del vehículo eléctrico.

El secretario de Transporte Pete Buttigieg defendió la semana pasada las medidas tomadas por California para prohibir el coche eléctrico a partir de 2035. Durante una entrevista en el prorama The Issue Is de Fox, Buttigieg dijo estar "realmente interesado" en seguir con esos desarrollos mientras se establece una política nacional.

Sin mencionar expresamente una prohibición federal de los automóviles de gasolina, el secretario de Transporte reconocío que la Administración "avanza en la dirección de los vehículos eléctricos".

Tenemos que asegurarnos de que esto ocurra lo suficientemente rápido como para ayudarnos a vencer el cambio climático.

California aceleró sus planes de prohibición de los vehículos de combustión apenas unos días antes de reconocer graves problemas en el suministro eléctrico. Sin embargo, varios estados quieren seguir sus pasos, entre ellos Washington, Massachusetts, Nueva York, Oregón y Vermont. Por su parte, Pete Buttigieg destacó que la industria se está moviendo en esta dirección, aunque lo cierto es que los fabricantes de automóviles han alertado de los problemas que trae la prohibición.

Pese a todo, la Administración Biden reconoce su interés en imponer el vehículo eléctrico. La secretaria de Energía Jennifer Granholm fue todavía más clara en su apoyo a la prohibición de los coches de gasolina en California, elogiando al Estado Dorado por "inclinarse" hacia la política climática. Además, la secretaria de Energía insistió en defender que la estrategía de vehículos eléctricos es "mucho más barata" y recordó que el Gobierno federal tiene el objetivo de que en 2030 la mitad de los vehículos nuevos que se vendan en el país sean eléctricos.

El vehículo eléctrico: ni más barato ni menos contaminante

Frente a este empeño por imponer el vehículo eléctrico -a base de prohibir los de combustión- los datos contradicen a la Administración Biden. Podemos leer en el Washington Post este artículo del experto en medio ambiente Bjorn Lomborg en el que detalla los falsos mitos del vehículo eléctrico.

Lomborg explica que los automóviles eléctricos suelen ser mucho más caros y no son necesariamente mucho más limpios:

A lo largo de su vida útil, un coche eléctrico emite menos CO2 que uno de gasolina, pero la diferencia puede variar considerablemente en función de cómo se genere la electricidad. La fabricación de baterías para coches eléctricos también requiere una enorme cantidad de energía, sobre todo procedente de la quema de carbón en China.

El experto señala que el impacto positivo de los coches eléctricos en la contaminación atmosférica no es tan sencillo como anuncian los gurús de la prohibición:

Los propios vehículos contaminan sólo un poco menos que uhe de gasolina porque sus enormes baterías y su consiguiente peso provocan más contaminación por partículas debido al mayor desgaste de los frenos, los neumáticos y las carreteras. Además, la electricidad adicional que necesitan puede producir grandes cantidades de contaminación atmosférica, dependiendo de cómo se genere. Un estudio reciente reveló que los coches eléctricos emiten más partículas contaminantes que los coches de gasolina en el 70% de los estados de Estados Unidos. Un estudio de la American Economic Association concluyó que, en lugar de reducir la contaminación atmosférica, cada coche eléctrico adicional en EE.UU. provoca daños adicionales por contaminación atmosférica por valor de 1.100 dólares durante su vida útil.

Bjorn Lomborg concluye su análisis señalando que los vehículos eléctricos sólo se impondrán en el mercado si la innovación los hace realmente mejores y más baratos que los coches de gasolina. El experto lamenta que los políticos estén gastando cientos de miles de millones de dólares e impidiendo que los consumidores adquieran los coches que desean a cambio de prácticamente ningún beneficio para el clima.